Haciendo recapitulación de los últimos acontecimientos sucedidos en el Centro Penitenciario Murcia II recordamos que, tras las diversas protestas que se llevaron a cabo durante este mes de mayo por lxs internxs protestando por su situación con respecto a la pandemia del COVID-19, unx de ellos fue amenazadx por los funcionarios de prisión. Las amenazas a dichx presx, Patxi Ruiz Romero, se dieron después de que una de las carceleras trató de quitarle el cartel informativo de las concentraciones, que él portaba en su bolso. En respuesta, Patxi solicitó a la funcionaria su número de identificación haciendo uso de sus derechos, a lo que ella se negó, violando estos mismos. Más tarde, esa misma carcelera fue a su celda acompañada del jefe de módulo. En principio acudían para dar a Patxi el número de identificación que este había solicitado, pero aprovecharon el momento para amenazarle. Le advirtieron de que sufriría las consecuencias. A continuación lo llevaron a reunirse con el director, con el subdirector de seguridad y con el jefe de servicios. Allí los anteriormente mencionados, también entre amenazas, le acusaron de ser el cabecilla impulsor de las concentraciones.
Respondiendo a estos ataques, una vez en su celda, Patxi se auto-lesionó cortándose en el brazo el pasado 9 de mayo. Lo trasladaron a enfermería donde graparon sus heridas. Sin embargo, debemos denunciar la actitud del médico. Una enfermera le puso las grapas, pero el médico ni se dignó a mirarlo. Patxi le pidió algún calmante para poder dormir y la enfermera le ofreció Tranxilium (un potente fármaco de efecto ansiolítico, hipnótico, anticonvulsivante, sedante, relajante muscular y amnésico perteneciente al grupo de las benzodiacepinas). Cuando Patxi contestó demandando algo más suave, el médico le respondió que no le iba a dar otra cosa y que le daba igual lo que pasara con él. El preso, rodeado de carcelerxs, le pidió el número de identificación, a lo que el médico respondió: “Llevaros a este mierda de aquí”. El personal sanitario en prisión, a veces, no es demasiado agradable.
Protestando por todos los hechos acontecidos y en vista de la actitud que mantienen los dirigentes y funcionarios de la prisión, Patxi inició el 11 de mayo una huelga de hambre y sed. Esta es una situación muy grave, ya que durante este tipo de huelga los órganos del cuerpo empiezan a fallar a partir del cuarto o quinto día. Así mismo, diferentes presxs vascxs secuestradxs en distintas cárceles del Territorio Español se han puesto también en huelga de hambre en apoyo al compañero.
La pasada madrugada del día 13 de este mes, también se realizó un acto de solidaridad en las inmediaciones de la cárcel de Campos del Río. Dejamos el vídeo de la acción aquí y también una viñeta relacionada:
También dejamos aquí un audio de un amigo de Patxi, donde anima a hacer difusión de la represión que está sufriendo el compañero y a que no lo dejemos solo:
Desde distintos puntos de la península se está realizando una campaña de llamadas de teléfono y envío de faxes en apoyo a Patxi Ruiz Romero, solicitando la responsabilidad de las autoridades penitenciarias por su situación. Animamos a toda persona a sumarse a dicha campaña. ¡Alcemos la voz por aquellxs que se ven privada de ella!
·Llamadas telefónicas
Teléfono del Centro Penitenciario Murcia II: 968 65 79 59 / 968 65 78 01
·Faxes (dos opciones propuestas)
1-Número de fax del Centro Penitenciario Murcia II: 968 657 959
Carta modelo dirigida al director del centro:
https://drive.google.com/file/d/1ta5Wuw5SgNKYEnfczhbyS9bwXhIsAZ2I/view
2-Número de fax del Juzgado Central de Menores con Funciones de Vigilancia
Penitenciaria ante el la Audiencia Nacional: 914007438 / 914007439
Carta modelo adjuntada en las imágenes de aquí abajo.
Para el envío de faxes recomendamos descargar la aplicación Fax.plus https://www.fax.plus/ (nos permite enviar hasta diez -en el caso de la carta enviada al Centro de Menores sólo cinco, pues consta de dos páginas)
Que la solidaridad no sea solo una palabra escrita
!!!ABAJO LOS MUROS!!!